Querido Lector:
Hace poco, un suscriptor nos recomendó no olvidar “a los lectores de la Ciencia Cristiana” al escribir de una manera que sea accesible para la gente nueva, y agregó: “¿No es una forma de mala práctica creer que la gente nueva no puede comprender ciertas cosas?”.
Nosotros en verdad valoramos a nuestros lectores regulares. ¡Muchas gracias a todos! Y sí, sería incorrecto suponer que aquellos que son nuevos en la Ciencia Cristiana no pueden comprender sus ideas metafísicas esenciales. Toda la humanidad es fundamentalmente capaz de comprender y practicar la Ciencia Cristiana. Pero también es compasivo estar atentos a la forma en que presentamos las ideas a aquellos que no están familiarizados con ellas. Cristo Jesús hablaba a las multitudes en parábolas usando experiencias de la vida diaria que ellos conocían, como sembrar la semilla, la relación del pastor y sus ovejas, la alegría de un ama de casa al limpiar su hogar para encontrar una moneda perdida, y el pensar en la jerarquía al disponer dónde deben sentarse los invitados en el banquete de una boda.
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