Libertad — ¡qué estado tan maravilloso! Todos queremos vivir en “ese” estado. Pero parece difícil ubicarlo. Aun siendo tan deseable, ha eludido a la humanidad durante siglos.
¿Por qué?
¿No será que lo hemos buscado donde no se encuentra, en cosas materiales o físicas, o meramente en condiciones humanas? La libertad es un estado espiritual aquí, ahora mismo, y eso es “lo que” tenemos que buscar. Es el reino del Amor divino que ya está dentro de los hijos de Dios y es allí “donde” lo encontraremos.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!