De joven me hallaba sufriendo de una afección a los ojos y esta condición persistió al ir creciendo. Recibí tratamiento médico para los ojos en mi país como también en el extranjero. Se temía que tuviera glaucoma.
Durante los años de la Primera Guerra Mundial, en cierta ocasión en que me encontraba hablando con una amiga acerca de la condición que me afectaba, me recomendó un pequeño libro que estaba leyendo ella que quizás podría ayudarme. Yo andaba a la búsqueda de más espiritualidad.
Se me prestó el libro cuyo título es Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, y todas las noches después de retornar a mi hogar me dedicaba a leerlo.
Mi primera experiencia fue que éste era el primer libro que pude leer sin que me dolieran los ojos. Lo leía y leía noche tras noche, hasta que al fin de ese año me quité los anteojos y desde entonces no he vuelto a usarlos más.
Muchos me han preguntado cómo se explica que yo no uso anteojos. Y mi respuesta ha sido: “Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras por Mary Baker Eddy. ¡La Ciencia Cristiana!”
Ha pasado más de medio siglo y doy gracias a Dios de que aún puedo leer y escribir sin la ayuda de anteojos.
Weybridge, Surrey, Inglaterra