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Ciencia y Salud: Su enseñanza pura y completa

Del número de septiembre de 1975 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


De vez en cuando nos llegan preguntas sobre lo que manifiestan algunas personas o agrupaciones que pretenden y sostienen que sus interpretaciones particulares de las enseñanzas de Mary Baker Eddy son necesarias para una comprensión cabal de la Ciencia CristianaChristian Science: Pronunciado Crischan Sáiens.. Esto incluye supuestas explicaciones sobre el libro de texto de la Ciencia Cristiana, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, y enmiendas para mejorarlo.

Como Descubridora y Fundadora de la Ciencia Cristiana, ¿qué nos dice la Sra. Eddy sobre este asunto?

En Retrospección e Introspección nos dice: “Pasarán siglos antes de que la exposición de los inagotables tópicos de Ciencia y Salud sean suficientemente entendidos para ser demostrados plenamente”.Ret., pág. 84; Y en Miscellaneous Writings (Escritos Misceláneos), nos dice además: “Apenas una mitad, comparada con todo lo que hay en las Escrituras y en el libro de texto de la Ciencia Cristiana, ha sido asimilado por los buscadores más leales; sin embargo, esta asimilación es indispensable para el progreso de todo Científico Cristiano”.Mis., pág. 317;

¿Qué se necesita para obtener esta profunda comprensión, esta cabal demostración? La respuesta es clara: Asimilar espiritualmente las verdades inagotables que ya han sido reveladas mediante la Biblia y Ciencia y Salud.

Es muy obvio que nadie en el presente ha demostrado apenas ni “la mitad” del tema infinito expuesto en esos dos libros. La honestidad debiera hacernos a todos, por lo menos, tan humildes como a la autora de Ciencia y Salud cuando escribe, refiriéndose a ella misma, en el Prefacio: “Hoy, aunque gozando de progreso, se considera todavía una discípula dócil, aguardando a la puerta celestial la llegada de la Mente de Cristo”.Ciencia y Salud, pág. ix;

Éstas son palabras de una guía cristiana cuyo discipulado incluía el estudio constante y fiel de la Biblia y del libro en el cual ella había expuesto la Ciencia del Cristo tal como le venía mediante la revelación, la razón, y la demostración. Aunque las implicaciones lógicas y la aplicación práctica de su exposición de la Verdad absoluta son susceptibles de un desarrollo ilimitado en la experiencia individual, la Ciencia fundamental misma está expuesta en el libro de texto de la Ciencia Cristiana en su totalidad y finalidad — está expuesta con precisión, poder, y absoluta autoridad.

Este hecho, sin embargo, presenta a veces un interrogante que se basa en el comentario que hace la autora en el Prefacio, de que ella no ha hecho ningún esfuerzo en Ciencia y Salud “por embellecer, elaborar o desarrollar en todos sus detalles un tema tan infinito”.ibid., pág. x; Este comentario, que indica la necesidad del estudiante de crecer en su propia comprensión espiritual, ha sido tergiversado para apoyar argumentos de que el libro está incompleto, que sólo es apropiado para el estudio elemental, o que necesita de una interpretación y explicación definitivas de parte de escritores que pretenden tener un discernimiento más profundo que añadir a lo que la Sra. Eddy escribió.

Es probable que los estudiantes que han estudiado el libro de texto de la Ciencia Cristiana durante toda su vida, y que se han dado cuenta de que sólo comienzan a sondear su profundidad, descarten impacientemente estas pretensiones. Sin embargo, en beneficio de aquellos pensadores menos experimentados en esta Ciencia, a quienes este tipo de argumentos les parezca plausible, es necesario que examinemos este tema más cuidadosamente.

Nuestro amado Maestro, Cristo Jesús, en una ocasión dijo a sus discípulos que él tenía muchas cosas que decirles que en esa ocasión ellos no podían sobrellevar. Luego profetizó que después que él no estuviera personalmente con ellos, el Padre enviaría al Consolador, el Espíritu Santo, o el “Espíritu de verdad”, que les enseñaría “todas las cosas” y los guiaría “a toda la verdad” Juan 14:17, 26; 16:13;. La Sra. Eddy claramente ha expuesto que al descubrirse la Ciencia Cristiana y al escribirse el libro Ciencia y Salud, esa profecía ha sido cumplida, y el cristianismo puede ahora comprenderse y demostrarse progresivamente como Ciencia.

Respecto a esto, nuestra Guía ha escrito: “Ni las mismas Escrituras dieron una interpretación directa de la base científica para demostrar el Principio espiritual de la curación, hasta que nuestro Padre celestial vio apropiado revelar este ‘misterio de la piedad’ mediante la Clave de las Escrituras, en Ciencia y Salud”.Ret., pág. 37; Pero en ninguna parte la Sra. Eddy ha indicado que otra revelación sería necesaria para explicar el fundamento científico de la demostración cristiana que le fuera revelado, o que otra clave sería necesaria para tener acceso a Ciencia y Salud.

Este libro contiene los “Artículos de Fe” de la Ciencia Cristiana; las “Proposiciones” de la Ciencia Cristiana, que son las proposiciones fundamentales de la metafísica divina; “la declaración científica del ser”; el capítulo “Recapitulación”, que es la única base para la instrucción en clase de la Ciencia Cristiana; y una fuente inagotable de declaraciones corroborativas que muestran todas las posibilidades del ser a toda etapa y condición de la consciencia.

En sus otras obras, en las publicaciones periódicas que estableció, y en las instituciones que fundó, la Sra. Eddy, con amoroso cuidado, le ha dado al Científico Cristiano la ayuda que él necesita para el crecimiento espiritual que le hará posible captar mejor los tesoros que se encuentran en la Biblia y en Ciencia y Salud, los dos libros básicos del Científico Cristiano. El estudiante encuentra tierna protección en el siguiente precepto del Manual de La Iglesia Madre: “La Biblia, juntamente con Ciencia y Salud, y otras obras de la Sra. Eddy, serán sus únicos libros de texto para instruirse en la Ciencia Cristiana, y para enseñar y practicar la curación metafísica”.Man., Art. IV, Sec. 1;

Cual bondadoso pastor, y no como severo autoritario, Jesús advirtió a sus seguidores: “El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador”. Les indicó que las ovejas conocen la voz del pastor pero “al extraño no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños”. Juan 10:1, 5; En este discernimiento está su protección.

Lo que Jesús dijo en parábolas ha sido revelado hoy por la clave de la Ciencia. Cuando los que se atribuyen a sí mismos el cargo de intérpretes de los escritos de la Sra. Eddy y sostienen que sus respectivas interpretaciones son necesarias para la comprensión cabal de la Ciencia Cristiana o para completarla, se condenan a sí mismos ya que muestran que nunca han comprendido las sencillas palabras de la Sra. Eddy. Citemos un pasaje más:

“ ‘Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras’ es un libro de texto completo de la Ciencia Cristiana, y su método metafísico de curación se ha explicado con tanta claridad como puede ser posible en virtud de la necesidad de expresar lo metafísico en términos físicos. No hay absolutamente ningún secreto adicional fuera de sus enseñanzas, o que le dé a uno el poder de sanar; pero es esencial que el discípulo adquiera la comprensión espiritual del contenido de este libro para poder curar”.Mis., pág. 50.

Éstas son palabras de la Descubridora y Fundadora de la Ciencia Cristiana, pero la voz que habla por intermedio de ellas es la voz de la experiencia, del sentido común, y de la Verdad revelada.

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