En un momento de mi vida al que hubiera sido difícil agregar una nueva desventura a mis ya prolíficas dificultades, encontré la luz, el amanecer con toda su gloria y promesa — la Ciencia CristianaChristian Science: Pronunciado Crischan Sáiens..
Había dejado la casa de mis padres y no estaba en buenas relaciones con ellos. Entonces dejé de ver a mis amigos, a pesar de que siempre los había considerado como algo importante. Debido a mi temor e incertidumbre fumaba en exceso y bebía más. Todo esto, unido a una alimentación deficiente, hacía cada día más dolorosa una úlcera que, a pesar de mi juventud, tenía desde hacía dos años. A todo esto debo agregar mi lamentable estado financiero, ocasionado por la mala administración y falta de atención a mis ocupaciones, las tirantes relaciones con mis compañeros de trabajo, y las constantes sugestiones de limitación que me impedían probar nuevos métodos.
Me habían presentado a un practicista de la Ciencia Cristiana, y decidí llamarlo y pedirle ayuda. Le expuse mi caso y él me dio un mensaje de amor, alegría y confianza. Por fin sentí que una puerta se abría hacia la luz, hacia Dios, que era mi Padre, aquí y ahora, y no lejano e inalcanzable.
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