No importa
que el sentido material
no me haga ver
tu rostro,
porque yo sé
que cerca mío estás,
hoy como ayer.
La Verdad es el único Dios.
Y la Verdad es el Amor.
Nada puede separar
lo que el Amor une.
“Todo-en-todo” es nuestro Dios.
Y en el Todo hay sólo bien.
Yo me elevo en oración,
y ya alcanzo a comprender
que todos somos en Él.
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