Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Educación que salva

Del número de marzo de 1980 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


En el Medio Oriente, nació hace dos mil años un singular maestro, Cristo Jesús. Se ocupó de las irreducibles y finales verdades del ser y las demostró. Y en el laboratorio de su vida, y en la esfera más amplia del público en general, probó al sanar y al contender con los desafíos provenientes del mundo natural, la validez de lo que él sabía y enseñaba, tanto explícita como implícitamente.

No era él un instructor y demostrador común y corriente, pues la instrucción que impartió liberó a la gente de tal manera de las supersticiones mortales y la ignorancia, y de las limitaciones inherentes a éstas, que es conocido como el Salvador. Estaba impulsado por el Amor inmortal e informado por la Mente infinita. Hoy en día, nosotros podemos ser científicamente educados en la medida en que reconozcamos esto y nos movamos en la dirección que él indicó en sus enseñanzas y en su vida. Yendo directamente a la esencia del asunto, Mary Baker Eddy dice: “Jesús de Nazaret enseñó y demostró la unidad del hombre con el Padre, y por esto le debemos homenaje eterno”.Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, pág. 18;

La educación científicamente basada incorpora esta verdad salvadora e inmortal: El hombre es uno con Dios como el efecto es uno con la causa. El carácter práctico de esta verdad se manifiesta a medida que desarrollamos una comprensión de los sinónimos que la Ciencia CristianaChristian Science (crischan sáiens) emplea para Dios — Vida, Amor, Verdad, Principio, Alma, Espíritu, Mente.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / marzo de 1980

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.