Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

La savia enaltecedora del Cristo

[Original en español]

Del número de agosto de 1990 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Cuando plantamos una semilla lo hacemos esperando que se desarrolle y se transforme en un pequeño árbol y, con el tiempo, en un árbol grande. La semilla se va transformando mientras crece hasta que se vuelve un árbol con tronco, ramas y hojas. A medida que el árbol se desarrolla, es nutrido por la savia que lo ayuda a mantenerse fuerte y erguido, aun ante los ataques de tormentas y vientos. Cuando no hay obstáculo, la savia nutre todo el árbol.

En cierto sentido, podemos comparar nuestras vidas con el árbol. Somos alimentados, de manera ilimitada, cuando pedimos sabiduría a Dios, quien es Amor divino. El nos brinda salud, fortaleza y sustento. Su amor, manifestado a través del Cristo, la Verdad, nos alimenta y nos hace crecer espiritualmente.

Nuestra creciente comprensión de Dios comienza a liberarnos del materialismo y a llevarnos hacia la luz, de manera que podamos seguir al Cristo. El conocimiento y la comprensión nos alimentan y fortalecen.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / agosto de 1990

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.