Hace Poco Nuestra iglesia filial se fijó la meta de regalar ejemplares de Ciencia y Salud de manera individual. Varios de los miembros compartieron ideas que les han sido de mucha ayuda en el pasado, y uno de ellos dijo que ella siempre guarda un ejemplar de Ciencia y Salud en el asiento delantero de su automóvil. Como me pareció una buena idea, empecé a llevar un ejemplar de Ciencia y Salud en el auto, donde se guardan las maletas. Unos días después, tuve que ir a la concesionaria local para revisar los neumáticos del coche. El empleado necesitó la llave para quitar los tapacubos, y le dije que la encontraría en la caja de herramientas en el maletero.
Cuando terminó, el hombre dijo que el libro que estaba en el auto tenía un título muy interesante, pero que no le parecía tan realista, ya que "ciencia" y "salud" eran palabras contradictorias. Dijo que su señora había estado yendo de médico, en médico, y habían gastado mucho dinero en ayuda médica, pero que su esposa aún no se sentía mejor.
Le comenté cómo Ciencia y Salud por Mary Baker Eddy les explicaría a él y a su esposa la verdad acerca de la salud. Luego le pregunté si le gustaría tener el libro, y él se mostró muy contento de recibir un ejemplar. Le dije que soy Científica Cristiana. Me sorprendió con su siguiente pregunta: "¿Qué es un Científico Cristiano?" El no había oído hablar de la Ciencia Cristiana, ni sabía que tenemos iglesias alrededor del mundo; pero era una persona verdaderamente receptiva a la verdad.
Varios días después, recibí una de llamada suya preguntándome dónde podía obtener otro ejemplar de Ciencia y Salud para un amigo. Dijo que él y su esposa estaban disfrutando del libro y que se sentían bien de tan sólo leerlo.
Bueno, esto me dio más valor. Entonces, trasladé el ejemplar de Ciencia y Salud al asiento delantero de mi coche. El primer día que lo hice, vi a una mujer parada junto a mi auto cuando salí del supermercado. Estaba mirando al interior del auto, y me dijo que estaba interesada en el título del libro. Me comentó que había estado escuchando un programa de radio de vez en cuando en la mañana del domingo (nuestra transmisión radial del Christian Science Sentinel), y que siempre había querido averiguar dónde podría obtener un ejemplar de Ciencia y Salud. Fue un verdadero gozo encontrarle hogar a otro ejemplar del libro. Está de más decir que estoy disfrutando de mi nueva compañía del asiento delantero, y no hallo la hora de ver cuál será mi siguiente aventura.
