En Nuestra Sociedad actual, ¿sigue siendo la honradez la mejor norma de conducta, en todo momento y en toda circunstancia? Parece haber acuerdo unánime en que la honradez todavía es importante, pero la pregunta es ¿cuán importante es?
Hace algunos años, cuando era profesor en una importante universidad de un estado del oeste medio, me dirigía a mi salón de clase por un pasillo concurrido y bullicioso para dar mi clase de la una de la tarde, cuando repentinamente comencé a sentirme enfermo. A medida que avanzaba, me fui dando cuenta claramente de que no podría dar esa clase, así que decidí ir al salón y despedir a los alumnos. Pero dado que no deseaba admitir públicamente que no me sentía bien, resolví que lo mejor que podía hacer era decirles que había sido convocado a una reunión de profesores de último momento. Se sentirían felices de que no hubiera clase, y yo podría regresar a mi oficina.
Sin embargo, la Lección Bíblica de esa semana (que se encuentra en el Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana) incluía la siguiente cita de Ciencia y Salud por Mary Baker Eddy: "La honradez es poder espiritual. La falta de honradez es debilidad humana, que pierde el derecho a la ayuda divina".Ciencia y Salud, pág. 453. Había estudiado la Lección esa mañana, y en ese momento esta cita inundó mi pensamiento. Me detuve y me dije casi en voz alta que ¡no podía ser deshonesto! No podía mentir, por más inofensiva que pareciera la mentira. Confiaba en el poder espiritual, y ciertamente no quería expresar debilidad humana. ¡No perdería mi derecho a la ayuda divina!
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