Como un ave, que después de refrescarse junto a un lago mira hacia adelante y levanta vuelo con elegancia y determinación, este Heraldo extiende sus nuevas, amplias alas, para cumplir con el anhelo de "proclamar la actividad y disponibilidad universal de la Verdad" en una época que exige enfoques más originales y visión espiritual.
Las verdades que propaga esta revista no han cambiado, pero la forma de llegar a los corazones de todo el mundo debe tomar naturalmente contornos más ágiles e imaginativos. La división en secciones de temas específicos, la incorporación de mayores ilustraciones, el agregado de subtítulos dentro de artículos, son algunas de las características de estilo de este Heraldo renovado.
Y además... observará el nuevo nombre con que comenzamos el año, donde utilizamos el término original en inglés de Christian ScienceCiencia Cristiana con que Mary Baker Eddy denominó a su descubrimiento. Ella se refiere a este nombre de la siguiente manera en su obra Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras: “En el año 1866 descubrí la Ciencia del Cristo o las leyes divinas de la Vida, la Verdad y el Amor, y nombré mi descubrimiento Christian Science” (pág. 107). En la página 13 presentamos un editorial que explica en detalle la razón de este cambio.
Asimismo, el Heraldo se engalana trayéndole otro artículo de la Sra. Eddy, “Preguntas y Respuestas”, que ahora publicamos en español por primera vez.
Finalmente, esperamos que los diferentes temas que abordamos le sean de utilidad en su labor de encontrar respuestas sobre la espiritualidad. Las diferentes curaciones, sembradas a lo largo de esta lectura, no dejan de afirmarnos y fortalecernos, mostrando cuán eficaces siguen siendo hoy las enseñanzas de Cristo Jesús.
Con afecto,
“Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas”.
2 Corintios 10:4
