Es importante entender porqué el espiritismo y la espiritualidad que enseñó Cristo Jesús son diferentes.
Algunas Personas piensan que el espiritismo es algo que pertenece a la época victoriana, y que tuvo mucha influencia durante los últimos años del siglo pasado, en particular en los Estados Unidos. El diario nacional de los espiritistas, The Banner of Light, era publicado en Boston y en Nueva York, y espiritistas del siglo XIX se reunían en Walden Pond y en Cape Cod en Massachusetts.
Sin embargo, al mismo tiempo, algo muy diferente estaba ocurriendo en Massachusetts. Mary Baker Eddy, la Descubridora y Fundadora de la Christian Science, estaba escribiendo un libro titulado: Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras. En el mismo ella incluyó un capítulo titulado: “Las Ciencia Cristiana en contraste con el espiritismo”. En ese capítulo la Sra. Eddy explica: “Cuando se comprenda la Ciencia de la Mente, se verá que el espiritismo es principalmente erróneo, sin base ni origen científico, sin prueba ni poder fuera del testimonio humano. Es el vástago de los sentidos físicos. No hay sensualidad en el Espíritu. Jamás he podido creer en el espiritismo”.Ciencia y Salud, pág. 71.
Mientras muchos de nosotros puede pensar en el espiritismo en términos de una oscura sesión espiritista, bolas de cristal, etcétera; películas como Ghost y Casper han llevado este modo de pensar a mucha gente. Hoy en día los espiritistas, a menudo llamados “médiums”, han publicado varios “best sellers”. También existen universidades que dan clases sobre cómo ser médium. Entonces, es muy importante entender porqué el espiritismo y la espiritualidad que enseñó Cristo Jesús son diferentes.
Los espiritistas creen que una persona que ha fallecido puede comunicarse y hasta influir en aquellos de nosotros que estamos viviendo en la tierra hoy en día. Creen en la posesión, es decir en que un espíritu malo o espíritus malos pueden entrar en el cuerpo de alguien y controlarlo. El espiritismo también incluye la sutil creencia de que algunas personas con una fuerte personalidad pueden, a través de su pensamiento, dominar o influenciar a otros para que hagan cosas que normalmente ellos no harían.
Un punto de vista diferente
Estas creencias destacan el poder de las influencias del bien y del mal, y nuestra incapacidad de hacer algo respecto a ellas. Sin embargo, la Biblia nos muestra un punto de vista diferente sobre la realidad. Aparte de la advertencia de que no debemos esforzarnos por consultar a los espíritus, tal como se describe en Isaías 8:19, encontramos muchos ejemplos en las Escrituras que muestran la habilidad de Jesús para echar fuera demonios con un poder superior, y su resistencia a las sugestiones del espiritismo. Véase Lucas 11:14-20; 24:36-39.
En Ciencia y Salud la Sra. Eddy explica el mensaje bíblico de la bondad de Dios. Revela que Dios, el bien, es el único poder que existe, y nos dice como este hecho espiritual nos permite probar que el mal no tiene poder. El hombre, que siempre coexiste con Dios, el Espíritu, nunca se convierte en un espíritu, ni es un médium del Espíritu. Al contrario, el hombre expresa la naturaleza del Espíritu, la Vida infinita. El Amor, Dios, es la única influencia que tiene el hombre, Su semejanza espiritual. Dios es el único Ego, la única Mente y el único comunicador. La Sra. Eddy escribe: “No es la intercomunicación personal, sino la ley divina, lo que comunica la verdad, la salud y la armonía a la tierra y a la humanidad”.Ciencia y Salud, pág. 72.
El comprender estas verdades de Dios nos ayuda a superar las sutiles formas en que el espiritismo afirma dominar nuestra vida diaria. Por ejemplo, si en una pareja uno trata de dominar al otro, si uno de los padres trata de dominar al hijo o viceversa, estas situaciones se pueden enfrentar con la oración comprendiendo que son formas en que el espiritismo trata de influenciarnos. En la política, si parece que una personalidad más fuerte trata de controlar a los demás, el reconocer que el espiritismo no tiene poder traerá libertad. Si usted tiene un problema que lo agobia y no le permite pensar en otra cosa, este tipo de mesmerismo es también una forma de espiritismo, y la oración puede liberarlo de él.
Del mismo modo que no hay ningún poder que pueda dominarnos, no hay nada dentro de nosotros que quiera controlar o dominar a otros.
Cuando observamos los resultados de la oración, comprendemos que el espiritismo no es algo que debemos temer. Tenemos el derecho otorgado por Dios de saber y reclamar el hecho de que el hombre está sólo bajo el control de Dios. Solo la influencia del bien, la Verdad, descansa sobre nosotros o sobre los que queremos. El Amor divino gobierna todas las situaciones. Cuando enfrentamos y negamos la creencia en pensamientos dominantes, nos liberamos de ellos. He aquí un ejemplo.
Aquí, un ejemplo
Aun amigo mio le ocurría que siempre que tenía que tratar con un individuo que tenía cierto carisma, hacía y decía cosas poco inteligentes. Mi amigo desafiaba específicamente la creencia de que el espiritismo tenía poder, y oraba para comprender que Dios es el único Ego, el único YO SOY. Específicamente sabía que solo Dios lo influía y que no podía ser afectado ni dominado por el concepto que otros tenían de él. Estas verdades lo liberaron y eliminaron el sentimiento de que estaba bajo el poder o la voluntad de otra persona.
Hay otros falsos modelos de pensamiento que tratarían de dominarnos, como por ejemplo, el temor. A menudo el temor parece que nos consume. Podemos, con autoridad, reemplazar el temor con las verdades del poder y de la totalidad de Dios. El perfecto Amor echa fuera el temor. La Mente divina es la única Mente, y Dios no es temeroso. El hombre, que expresa a la Mente de Dios, nunca ha sido consumido por una consciencia temerosa. Cuando estamos dispuestos a trabajar espiritualmente de esta manera, sentimos que el temor desaparece.
Otras consideraciones
Algunas Veces un pensamiento de lujuria puede que trate de gobernar nuestros pensamientos y acciones. Una vez más, con la autoridad otorgada por Dios, podemos afirmar que somos realmente la semejanza de Dios, pura y satisfecha. El Espíritu, y no la materia con sus intrigas, es lo único que puede ofrecer satisfacción duradera.
Es importante entender que del mismo modo que no hay ningún poder que pueda dominarnos, no hay nada dentro de nosotros que quiera controlar o dominar a otros. Creer que podemos dominar o manipular, abre la posibilidad de que nosotros podamos ser manipulados. A medida que comprendemos mejor la ley divina, comprendemos que aunque quisiéramos o pensáramos hacerlo, no podemos controlar a otros, es metafísicamente imposible. Dios, el creador de todo ser, está siempre expresándose a Sí mismo, y el hombre es esta expresión espiritual. El Espíritu tiene control total sobre todo ser verdadero. La Biblia declara: “Dios no hace acepción de personas”. Hechos 10:34.
¿Hay otras formas en que el espiritismo nos influencia?
No Es La Herencia una creencia en que aquellos que se han ido pueden influenciarnos ahora? ¿No es la genética una creencia de que el ser está influenciado por otros médiums a través del ADN? Esta teoría falsa, toma muchas y sutiles formas, entre ellas la creencia en el contagio, pero se puede probar que ninguna de ellas tiene poder.
Una curación vale más que mil palabras
Una Mujer Que tenía un fuerte resfrío o síntomas de gripe, llamó a una practicista para pedirle ayuda a través de un tratamiento en la Christian Science. La practicista había estado pensando acerca del espiritismo, debido a que era la época de “Halloween” y había propagandas humorísticas en la televisión acerca de los buenos y los malos espíritus. La practicista le dijo a la señora que le daría mucho gusto darle tratamiento y que desafiaría específicamente la creencia en el espiritismo. A las dos horas, la paciente llamó otra vez y le informó que los síntomas habían desaparecido por completo. No hubo dudas de que el tratamiento había sido eficaz, pero la paciente deseaba saber: “¿Qué tiene que ver el espiritismo conmigo?” La practicista habló varias veces con ella respecto a este asunto.
Para ayudar a la paciente, la practicista había reconocido con toda certeza que el mal no se puede transferir, ya que Dios, el bien, llena todo el espacio y gobierna toda acción. Sólo la paz y el gozo, el amor y la armonía, pueden ser reflejados por el hombre. La practicista le explicó a la paciente que había tratado específicamente la creencia de que otro ser, un germen o virus podía transferirle algún mal. Compartió con ella el hecho de que sólo el bien pasa de Dios, la Verdad y el Amor, al hombre. El hombre no es vulnerable ni está indefenso. El hombre es la idea incorpórea e individual de Dios, y esa individualidad está segura por toda la eternidad. Es el Cristo, la verdad de Dios, que manifiesta en la consciencia humana salud y seguridad, pureza e individualidad.
Es magnífico no sólo no creer en el espiritismo, sino saber refutarlo. Es importante entender las tendencias que tiene el pensamiento y saber cómo defendernos de ellas. El espiritismo, cuando es entendido, no tiene poder. Entonces, la respuesta a la pregunta: “¿Qué tiene que ver el espiritismo con usted y conmigo?” es clara: Absolutamente nada.
¿POR QUE ESTÁ LA GENTE INTERESADA EN LA ESPIRITUALIDAD?
A Menudo Se Despierta en nosotros el interés en la espiritualidad cuando nos sentimos insatisfechos con la vida. Nos preguntamos si no hay algo más en la vida fuera de lo superficial. Algo más sublime que esté más allá de lo que establecen los instintos, que sea verdaderamente bueno. Algo que nos permita aliviar los sufrimientos que atormentan a la humanidad. Para tales buscadores, la mera posibilidad de que haya en la existencia una dimensión espiritual a menudo fortalece la esperanza. Entonces podemos empezar a explorar varias posibilidades para saber más de la espiritualidad. La Biblia, y en particular el ejemplo y las enseñanzas de Cristo Jesús en los evangelios, han demostrado ser una poderosa fuente de inspiración para muchos buscadores.
Christian Science Sentinel
11 de agosto de 1997