Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Yo no estaba solo

Del número de enero de 2002 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Un día fui con mi familia a la casa de mis primos. Hacía poco que vivían allí, es una casa nueva en un barrio que no conozco. Entonces decidimos con mis primos y hermanos andar todos juntos en bicicleta. Era un hermoso día. A mí me tocó ir solo en una bici. Nos preparamos y salimos. Los padres se quedaron tomando mate en la casa.

Anduvimos siempre juntos, paseando y riéndonos. Cuando decidimos volver, me atrasé porque pasé por un charco con barro y me patinaba, por eso no pude salir enseguida. Cuando por fin logré ponerme en camino, los demás ya no estaban. Siguieron andando sin darse cuenta de que yo no estaba con ellos, y como mi rodado era chico no pude apurarme.

Me asusté mucho. No conocía el lugar y no podía orientarme. Empecé a andar, pero peor, me estaba alejando. No conocía nada.

En ese momento, traté de tranquilizarme. Pensé que no estaba solo, sino que Dios que está en todas partes, me amaba y me iba a indicar cómo llegar. Me quedé tranquilo. Entonces, empecé a ver cosas que ya había visto antes con mis primos y hermanos — una rotonda y un campo con caballos — seguí orando y de repente vi una casa que me había llamado la atención y que sabía que quedaba muy cerca de la casa nueva de mis primos. Entonces seguí confiado, porque me di cuenta de que estaba llegando.

Entré a la casa, me abracé a mi mamá y estaba feliz. Los demás volvieron más tarde porque empezaron a buscarme. Se alegraron cuando me vieron.

Le di muchas gracias a Dios.


Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / enero de 2002

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.