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Del número de julio de 1948 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Un detalle interesante

Ultimamente hemos tenido una nueva prueba convincente de como hombres y mujeres de diversos países pueden trabajar juntos en un espíritu de cordialidad y hermandad cuando están imbuídos de humildad y entendimiento espiritual. Hoy en día ochenta y tres Comités de Publicaciones se sienten más inspirados para proseguir con su importante tarea, por haber asistido a una conferencia de cinco días, que tuvo lugar en Boston el otoño pasado. Estos Comités vinieron de dieciséis países, figurando entre ellos varios países del hemisferio occidental, las Islas Hawái, las Islas Británicas, Sud Africa, Australia, Nueva Zelandia, Noruega, Suecia, Dinamarca, los Países Bajos, Suiza y Hungría.

Los Comités se reunieron para deliberar sobre los mejores medios de proteger los derechos de los Científicos Cristianos y de corregir declaraciones erróneas—ya sea de palabra o por escrito—respecto a la Christian Science. Durante el curso de la semana varios funcionarios de La Iglesia Madre, y redactores y representantes de la Sociedad Editora de la Christian Science, les dirigieron palabras de mucha inspiración.

Todos los que asistieron a esta conferencia quedaron admirados del valor y la fe demostrados por aquellos de sus colegas que, por venir de países del extranjero, tuvieron que vencer grandes obstáculos, tales como los de las restricciones sobre la exportación de dinero, para poder asistir a esta conferencia. Muchos de ellos emprendieron viaje con poco o ningún dinero, pero como se dirigían a La Iglesia Madre para tomar parte en una de las actividades sancionadas en el Manual de la Iglesia por Mary Baker Eddy, estaban seguros de que nada les habría de faltar. Jamás dudaron del cuidado del Padre y por eso todas sus necesidades quedaron satisfechas y fueron maravillosamente protegidos. Muchos Científicos Cristianos además de los Comités en los Estados Unidos, les tendieron la mano.

Los Comités y sus familiares fueron muy agasajados. Una mañana presenciaron la trasmisión de uno de los programas religiosos emitidos por radio desde el auditorio de La Iglesia Madre. Hoy en día estos programas son trasmitidos por unas doscientas setenticinco estaciones cada semana. Otro día por la tarde los Comités fueron recibidos en la casa del Primer Lector de La Iglesia Madre, que en una época fué el hogar de nuestra Guía. Allí fueron presentados al Primer Lector y a su señora esposa, como también a la Segunda Lectora.

Una noche fueron convidados a presenciar la trasmisión por radio del programa titulado: "The Christian Science Monitor Views the News" (Revista de las noticias por The Christian Science Monitor). En otra ocasión un distinguido hombre de negocios de la ciudad de Boston les mostró unas películas en colores, de un viaje que recientemente había hecho por Noruega, Alemania e Inglaterra. Además, los Comités procedentes del extranjero y sus acompañantes, y los miembros del Comité de Publicaciones en Boston asistieron a un banquete dado por los demás Comités, y cada delegado del extranjero fué obsequiado con un regalo. Y así la conferencia probó una vez más el poder unificador del Amor divino.

El ser miembro de La Iglesia Madre y la verdadera felicidad

En la página 57 del libro de texto, "Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras"; Mary Baker Eddy, Descubridora y Fundadora de la Christian Science, declara: "La felicidad es espiritual, nacida de la Verdad y el Amor. No es egoísta: por lo tanto no puede existir sola, sino que requiere que toda la humanidad la comparta."

No satisfecha meramente con señalarnos el camino a la felicidad, Mrs. Eddy nos proveyó los medios para alcanzarla. El ser miembro de La Iglesia Madre es uno de estos medios, pues trae consigo el deber de preocuparse menos de los asuntos personales y dedicarse más a la gran obra de compartir con toda la humanidad el secreto de la felicidad verdadera y perdurable.

Toda persona que ha sido estudiante de la Christian Science desde hace algún tiempo, que se haya apartado completamente de sus anteriores afiliaciones religiosas, y que este dedicándose diariamente al estudio de la Biblia, juntamente con Ciencia y Salud y las demás obras de Mary Baker Eddy, tiene el derecho de solicitar admisión como miembro de La Iglesia Madre.

Los formularios de petición y demás detalles, pueden ser obtenidos de los encargados de las salas de lectura, de los secretarios de las iglesias filiales, de cualquier practicista cuyo nombre figure en The Christian Science Journal, o de Gordon V. Comer, Clerk of The Mother Church, 107 Falmouth Street, Boston 15, Massachusetts, U.S.A.


Los periódicos de la Christian Science

Los periódicos que se detallan a continuación, fundados por Mary Baker Eddy, son publicados por The Christian Science Publishing Society, One, Norway Street, Boston 15, Massachusetts, U.S.A.:

The Christian Science Journal: Publicación mensual, en inglés: $4 al año; número suelto, 35 centavos.

Christian Science Sentinel: Semanario, en inglés: $4 año; número suelto, 10 centavos.

Trimestral de la Christian Science: En inglés, español, alemán, danés, francés, holandés, noruego y sueco: $1.25 al año; número suelto, 35 centavos. También se publica en las siguientes ediciones (en inglés solamente): Tamaño bolsillo, $1.25 al año; número suelto, 35 centavos; Tamaño grande para Lectores, $1.65 al año; número suelto, 45 centavos; en Braille, para los ciegos, $2.50 al año (12 números); número suelto, 25 centavos.

The Christian Science Monitor: Periódico diario—salvo domingos y días feriados—en inglés (con artículos religiosos traducidos a 17 idiomas); $14 al año; número suelto, 5 centavos.

El Heraldo de la Christian Science: Se publica mensualmente en alemán y francés; $2 al año; número suelto, 20 centavos, Ediciones trimestrales española (con un artículo en portugués), escandinava (en danés, noruego y sueco), holandesa, y Braille, para los ciegos, en inglés: $1 al año; número suelto, 25 centavos.

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