El elemento semejante al Cristo poseído por nuestra Guía fué lo que la inspiró a exponer la Ciencia que ella descubrió como un sistema curativo, un método de curación por el cual es restaurada y preservada la salud tanto moral como física. El amor que ella expresaba es el poder vital del Espíritu, Dios, y rinde sus frutos de curación — la evidencia del pensamiento espiritual. En su obra Retrospection and Introspection Mrs. Eddy dice (pág. 30): “El objetivo de mis más tempranos esfuerzos jamás ha cambiado. Se dedicaba siempre a aliviar los sufrimientos de la humanidad por medio de un sistema curativo que incluyera en sí toda reforma moral y religiosa.”
El cristiano objetivo de Mrs. Eddy halló expresión en muchos proyectos tendientes a la curación, uno de los cuales fué la publicación de nuestros periódicos religiosos, a saber, The Christian Science Journal, el Sentinel, los Heraldos y el diario The Christian Science Monitor. Estos están incluídos en el plan que trazó nuestra Guía para establecer su método de curación, destinado a elevar la mente humana por encima de sus males y limitaciones y revelar a los incorpóreos e inmortales hijos de Dios.
La misión de nuestros periódicos no es interpretar la obra de Mrs. Eddy “Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras”, sino más bien compartir con otros el fruto de nuestra propia demostración de las verdades que en ella se anuncian. En todas nuestras publicaciones vemos cumplida la profecía hallada en el salmo ciento cuarenta y cinco (vers.° 4): “Una generación alabará tus obras a otra generación, y anunciarán tus poderosos hechos.” Los periódicos están cumpliendo con el propósito de nuestra Guía de instruir al público por medio de la declaración y exposición del poder de la verdadera teología que revela la Christian ScienceEl nombre dado por Mary Baker Eddy a su descubrimiento (pronunciado Críschan Sáiens) y que traducido literalmente, es la “Ciencia Cristiana”..
Mrs. Eddy dice, y nuevamente cito de Retrospection and Introspection (pág. 30): “Muy a menudo se me pregunta por qué me fué revelada la Christian Science como una sola inteligencia, que analiza, descubre y aniquila el falso testimonio de los sentidos físicos.” Y es sobre este punto que deseo hacer hincapié hoy, es decir, sobre el hecho tan significativo de que la única inteligencia infinita, la Mente divina, apoya y mantiene nuestros periódicos religiosos y provee el desenvolvimiento del bien que se necesita para que estos cumplan con su misión de promover y revelar la armonía mundial.
Esta única inteligencia impulsa a cada uno de nosotros a descubrir la falsedad de la existencia mortal e inspira correctas exposiciones de la verdad. Nosotros vemos esto manifestado en la consciencia humana en forma de rectitud, lealtad hacia el libro de texto, Ciencia y Salud, diligencia al mantenerse un alto grado de excelencia, y la habilidad de sanar la enfermedad y el pecado. La Mente divina es inseparable de la integridad e inteligencia que ella inspira. Mrs. Eddy dice en su libro de texto (pág. 262): “La consagración al bien no disminuye la necesidad que tiene el hombre de buscar apoyo en Dios, sino que la acrecienta. La consagración tampoco disminuye las obligaciones del hombre para con Dios, más bien demuestra la necesidad suprema de cumplirlas.”
El hecho de que sólo existe una Mente, que irresistiblemente proclama su propia presencia y perfección, no puede jamás interpretarse en el sentido de que podemos asumir una actitud pasiva hacia nuestros periódicos o hacia la importancia que tienen para nuestro movimiento. La revelación que Dios hace de Sí mismo despierta, profundiza y aviva nuestro sentido de la obligación que tenemos de mejorarlos y apoyarlos. Nuestro celo y nuestra devoción al ideal de Mrs. Eddy saludan la aparición de la individualización de la Mente de su propia bondad por medio de sus propias ideas. Los periódicos cumplen su misión en el grado en que los miembros de esta Iglesia demuestran su individualidad verdadera como la activa expresión de la Mente divina.
Si concebimos al movimiento de la Christian Science y a nuestros periódicos como teniendo su origen en muchos seres humanos afanosos, los concebiremos en términos de la limitación humana y frustraremos el logro de nuestros ideales a cada paso. Pero cuando nos damos cuenta que la Christian Science emana de Dios y que nuestro movimiento evidencia la declaración propia de la Mente única, comenzamos a comprender las gloriosas posibilidades de nuestros periódicos. Mrs. Eddy dice en la página 10 de su Mensaje a La Iglesia Madre para el año 1900: “Todo aquello que tiende hacia el bien es una manifestación de Dios asertando y desarrollando el bien.”
Es sólo mediante la demostración de la Mente única, la única inteligencia, que ponemos nuestros periódicos en manos de la Deidad, y dejamos que Su bondad y sabiduría den color a su contenido y prueben Su poder. Cuando hacemos esto comenzamos a contemplar junto con Juan el “Río de agua de vida, resplandeciente como el cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero” (Apoc., 22:1). Entonces permitimos que las ilimitadas energías de la única inteligencia manifiesten su exclusivo origen, Dios, y de esa manera nuestras publicaciones van mejorando en calidad y eficacia.
Cristo Jesús dijo, tal como se anuncia en el Evangelio de San Juan (8:26): “Las cosas que yo he oído por parte de él [Dios], éstas hablo en el mundo.” Las colaboraciones enviadas a nuestros periódicos atraen al extraño a las puertas de la Ciencia, y lo sanan de sus males en el grado en que se anuncien en ellas las verdades que hemos oído del Padre. Es pues tarea del redactor de las colaboraciones religiosas y de sus redactores asociados el discernir, entre los artículos recibidos, aquellas cosas que se han oído de Dios y presentarlas al mundo para que otros las oigan, las amen y las utilicen. Los colaboradores y redactores del Monitor tienen la misma obligación moral de expresar la inteligencia única en sus justas y honestas investigaciones, informes y análisis de los asuntos humanos.
Todos los periódicos religiosos de nuestra Iglesia existen para promover el propósito que tuvo nuestra Guía al establecer un sistema curativo e instruir al público en las verdades del bien. Todos existen para exponer la unidad y totalidad de la Mente divina y la perfección de sus ideas. Por sus mismos propósitos se hallan bajo la jurisdicción del Amor divino y le sirven de agentes para poner en operación las fuerzas sanadoras de la inteligencia infinita y única. Tanto los redactores como los colaboradores están sujetos al mismo mandato de sanar a los enfermos y pecadores mediante la disipación de la ignorancia espiritual que obscurece el reino de Dios.
Los periódicos de la Christian Science for-man parte de un movimiento mental que está revelando a Dios y a Su Cristo, el ideal divino. Nuestra amada Guía nos dice en su libro Miscellaneous Writings (pág. 235): “Este movimiento mental tiene que adelantar las generaciones venideras: tiene que encaminar las ruedas de la razón con acierto, educar los afectos hacia fines más elevados, y librar el cristianismo de la influencia de supersticiones de una época anterior.”
