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En Ciencia y Salud, la Sra. Eddy declara...

Del número de agosto de 1974 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


En Ciencia y Salud, la Sra. Eddy declara (pág. 392): “Vuestras decisiones os dominarán, sea cual fuere el rumbo que tomaren”. He comprobado esta verdad repetidas veces, especialmente en casos de problemas de negocios.

Quizás mi más impresionante demostración de este hecho fue la que tuve en 1933, cuando el país parecía atravesar por malas condiciones financieras y yo estaba a punto de perder mi casa debido a un juicio hipotecario.

Al igual que muchos otros, después de especular en la bolsa con una cuenta de margen pensando aumentar mi capital para inversiones, en 1929 perdí todos mis ahorros casi de la noche a la mañana en la quiebra del mercado.

Por algún tiempo mis ventas de equipos comerciales continuaron bastante bien, pero en 1933 disminuyeron a tal punto que no alcanzaban a cubrir los mínimos gastos de vida, y me atrasé un año en mis pagos de impuestos e intereses hipotecarios.

Mientras me encontraba un día en una Sala de Lectura de la Ciencia Cristiana donde a menudo había encontrado ayuda, y utilizando las Concordancias de la Biblia y de los escritos de Mary Baker Eddy para encontrar dirección, leí en Marcos (11:23, 24): “Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho. Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá”. Continuando con mi investigación, llegué a Isaías (65:24): “Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído”.

De repente me di cuenta de que por varios años mi pensamiento había estado lleno de resentimiento por “Wall Street”, y por mi empleador. Mi pensamiento comenzó a cambiar de modo que vi mi situación como una buena oportunidad para demostrar la abundancia de la provisión y a Dios como fuente de todo bien legítimo. Este cambio de pensamiento fue fundamental.

Pero, ¿cómo establecer una oficina sin capital? Estaba decidido a seguir al pie de la letra el consejo bíblico (Romanos 13:8): “No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros”. Este deseo resultó ser el único capital necesario, ya que con el tiempo se me otorgó un crédito ilimitado debido a mi práctica de cumplir con mis obligaciones financieras puntualmente sin necesidad de tomar préstamos. Como primer paso, me sentí guiado a hacer arreglos con una oficina de mensajes para procurarme un número de teléfono y una dirección postal. Camino al centro de la ciudad para hacer tales arreglos, me encontré con un conocido que no había visto por varios años. Al contarle a este caballero lo que pensaba hacer, me invitó a que usara su despacho y los servicios de su secretaria, gratis, siempre que yo consintiera en vender sus productos junto con cualquier otro producto que yo decidiera vender. Un fabricante abastecedor, consintió en concederme algún crédito. Más tarde, el crédito aumentó, y siguió aumentando, en la medida en que las circunstancias lo justificaban.

Poco después, otro fabricante a quien yo había pedido la opción de venta de cierto equipo parecido al que yo vendía anteriormente, me persuadió a vender todo su ramo, que era muy extenso y uno de los mejores. Acontecimientos de esta clase siguieron ocurriendo por treinta y cinco años, constantemente asegurando el progreso y la prosperidad de mi negocio.

Contrario a lo que se cree generalmente en la actualidad, mi experiencia demuestra que uno no carece necesariamente de oportunidades por faltarle preparación universitaria y hasta secundaria, ya que yo me empleé inmediatamente después de terminados mis estudios primarios, aunque por cierto he seguido muchos cursos nocturnos aplicables.

Durante mis varias experiencias y adversidades he tenido el apoyo leal y devoto de mi querida esposa, quien ha sido un excelente ejemplo de frugalidad y abnegación. He gozado de más de cincuenta años en calidad de miembro de La Iglesia Madre y siempre estaré agradecido por la inspirada experiencia de la instrucción en clase.


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