Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Escucha a Dios

Del número de abril de 1978 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


La Biblia nos dice que cuando Abram era niñito vivía en una ciudad llamada Ur. La gente allí adoraba ídolos. Los ídolos son figuras a menudo talladas en algún pedazo de piedra, y a veces las hacen de manera que parezcan hombres. Tú las puedes ver y tocar, pero no tienen vida. No pueden pensar ni hablar.

La gente que adora ídolos les tiene miedo, pero esto es sólo porque creen que los ídolos son dioses que pueden hacerle mal a la gente.

Cuando Abram llegó a grande, escuchó al verdadero Dios que le hablaba y le decía que saliera y estableciera una nueva nación. Dios bendijo a Abram porque había oído Su voz. Abram había escuchado, y Dios le dio pensamientos buenos.

Si tú te quedas quietito y escuchas, entonces también tendrás pensamientos que vienen de Dios y sabrás lo que tienes que hacer.

El Dios verdadero es un Ser viviente. No puedes ver a Dios con los ojos o tocarlo con los dedos. Pero Él está allí mismo donde tú estás, y puedes conocerlo con tus pensamientos.

¿Cuáles son algunos de los buenos pensamientos que puedes escuchar? Los que te hacen siempre decir la verdad, amar siempre a todos, compartir lo que tienes, obedecer a tus padres. Entonces estás escuchando la voz de Dios. Él te está hablando. Sabes que Él te está diciendo que Él te ama y que te ha creado a ti y a todos buenos — a Su imagen.

Una vez que Abram estaba escuchando, oyó que Dios le decía: “No temas, Abram”. Gén. 15:1;

Nosotros tampoco tenemos que temer si mantenemos nuestros pensamientos cerca de Dios. Puedes saber que Él está siempre contigo cuidándote y protegiéndote para que no te pase nada.

Cuando Abram era bien anciano, su nombre fue cambiado a Abraham porque había sido fiel al Dios viviente. Había escuchado que Dios le decía: “Yo soy el Dios Todopoderso; anda delante de mí y sé perfecto”. 17:1;

Mary Baker Eddy dice en Ciencia y Salud: “El hombre es espiritual y perfecto; y por ser espiritual y perfecto, tiene que ser entendido como tal en la Ciencia Cristiana”.Ciencia y Salud, pág. 475.

Abraham escuchó a Dios. Nosotros también tenemos que hacerlo — y ser perfectos.

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / abril de 1978

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.