¿Nos estamos limitando, posiblemente condenándonos, por los conceptos que los demás se han formado de nosotros? ¿Nos está afectando, impresionando o asustando la manera en que nos clasifican? ¿Están influyendo en nuestro comportamiento los conceptos de los demás hasta el punto en que actuamos del modo que ellos esperan que actuemos, cumpliendo así lo que ellos predicen?
Una abuela le dijo a su nietecito: “Tengo que ir a ponerme bonita para tu abuelo”. Sin dudar un instante el niño le respondió con toda sinceridad: “¡Pero tú siempre eres bonita para él!”
El metafísico que se dedica a mirar más allá de lo físico, mira al hombre, la manifestación de Dios, y ama lo que ve, sea lo que fuere que parezca esconder o nublar la identidad verdadera.
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