En Mi Vida he podido comprobar lo que dice Ciencia y Salud: “Aquel a quien el 'brazo del Señor’ se ha revelado creerá a nuestro anuncio y, regenerado, se elevará a vida nueva”.Ciencia y Salud, pág. 24.
Conocí la Christian Science en momentos en que ya no quería vivir más, y me dirigía a Dios pidiéndole que me diera luz, una ayuda que me permitiera ver, pues de lo contrario moriría.
Debido a que siempre estaba buscando respuestas en la materia, vivía por ella y para ella con sus falsos placeres, como el alcohol, las drogas, con todo el desorden que esto conlleva. Para agravar aún más las cosas, pensaba que Dios era un ser que estaba muy lejos, y que nos había enviado a la tierra para que aprendiéramos a través del sufrimiento. Esta ignorancia acerca de Dios, me llevó a caer al abismo, no sin antes rodar varios metros antes de tocar fondo.
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