Parece existir la noción de que para que los hombres sean verdaderamente hombres, su naturaleza e identidad deben tener una fuerte inclinación sensual. La edición radial del Christian Science Sential conversó con dos hombres sobre el tema de la sensualidad y lo que aprendieron sobre su verdadera naturaleza como resultado de su estudio y crecimiento espiritual. A continuación publicamos sus comentarios.
Crecí Dentro de una sociedad y de una familia donde todo estaba permitido, de manera que salí con muchas chicas con las que tenía relaciones sexuales, y sinceramente pensaba que no existía nada que diera más satisfacción. Estaba tan convencido de que la sensualidad era el camino a la felicidad, que no me había percatado de que la búsqueda compulsiva de la satisfacción sexual era realmente egoísta y podía dañarme a mí y a los demás. Incluso razoné que en realidad yo era generoso, porque hacía que las mujeres sintieran tanto placer como yo.
Pero entonces llegó un momento en que estaba estudiando para ser cantante, y padecía de alergias y asma. Había intentado todo para sanar, desde acupuntura hasta zinc, así que cuando mi profesor de canto me dio a conocer la Christian Science, fui bastante receptivo porque quería sanarme. Me tomó un tiempo, pero finalmente sané de esas condiciones físicas mediante la oración en la Christian Science. Al mismo tiempo, sin embargo, descubrí algo que no esperaba; que mi naturaleza e identidad verdaderas no eran sexuales sino espirituales. Si bien estuve muy dispuesto a cambiar en términos de los problemas físicos, no fue así respecto a mi moralidad.
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