Bienaventurado el hombre
que halla la sabiduría,
y que obtiene la inteligencia;
porque su ganancia es mejor
que la ganancia de la plata,
y sus frutos más que el oro fino.
Más preciosa es que las piedras preciosas;
y todo lo que puedes desear no se puede
comparar a ella.
Largura de días está en su mano derecha;
en su izquierda, riquezas y honra.
Sus caminos son caminos deleitosos,
y todas sus veredas paz.
Ella es árbol de vida
a los que de ella echan mano,
y bienaventurados son
los que la retienen.
Proverbios 3:13-17
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